Cuando el piloto es el peor enemigo.
Foto Christian Volpati |
Aun no salimos del tremendo impacto del accidente de Germanwings. Las redes sociales están encendidas haciendo juicios de valor, y condenas ante el hecho de que el copiloto «hizo volar deliberadamente» el avión hacia la cumbre. No creo que sea momento de entrar en detalles, ni criminalizar a nadie. Hoy solo toca reflexión y prudencia.
Cada año, los pilotos en todas las compañías del mundo son sometidos a decenas de pruebas psicológicas, en donde se evalúa el estado del personal de vuelo. Los filtros suelen funcionar, y algunas personas son apartadas porque su estado puede interferir en la seguridad del vuelo. La mente humana es frágil, delicada, y puede quebrarse en cualquier momento. Problemas personales, disputas laborales, depresiones, stress son denotantes de conductas potencialmente peligrosas.
A Dios gracias, y quiero trasmitir una cierta tranquilidad, las tripulaciones son profesionales reputados, que usalmente aprecian su vida, y tienen un alto grado de servicio público. Sin embargo, no se puede negar la evidencia, que hay veces que el comandante es el peor de los enemigos. No ha habido muchos, pero el suicidio ha sido causa de algunos sonados accidentes. Frente a algunos accidentes no aclarados podemos sacar algunos.
Piet Strunk |
–26 de septiembre de 1976. Un comandante ruso estrella su Antonov 2 directamente contra unas casas en Novosibirsk, en donde vivía su mujer de la que se había divorciado. 12 personas murieron.
-Nos vamos a Japón. El 9 de febrero de 1982, el DC8 de Japan Airlines en vuelo 350 entre Fukuoka y Tokyo, se dispone a aterrizar en Haneda. Su comandante Katagari, decide montar las reservas 2 y 3 de forma deliberada. Aunque el copiloto e ingeniero de vuelo intentar resolver el problema, 24 de las 166 personas fallecieron. Katagari sufría un enfermedad mental.
-El 3 de septiembre de 1987 ocurre el más novelesco de todos; fue el de un Bae146-200 de PSA en vuelo 1771 entre los Angeles y San Francisco. Se precipita en Cayucos California. 43 personas pierden la vida. No es exactamente suicidio del piloto sino de un empleado de USair (la compañía madre de PSA) que tenía graves disputas laborales. David Burke, antiguo agente de facturación sube a bordo con un arma y dispara contra piloto y copiloto.
-El 22 de agosto de 1997. Un mecánico con disputas laborales roba un HS 748, despega, y hace que se desplome sobre una zona residencial. Por suerte, solo 4 personas perdieron la vida.
-El 13 de julio de 1994, se da uno de los pocos casos de suicidios en aviones militares. Un ingeniero ruso roba un caza en Kubinka y se lo estrella cuando se termina el combustible.
-El 21 de agosto de 1994 un ATR42 de Royal Air Maroc, con 44 personas a bordo se estrella directamente contra las montañas del Atlas. Se llega a la conclusión de que el capitán desconectó el piloto automático y condujo de forma deliberada el avión contra el suelo.
-Uno de los peores ocurrió el 19 de diciembre de 1997 cuando un Boeing 737 de Silkair que volaba desde Indonesia a Singapur entra en un picado sin que determinen las causas. Cuando se escuchan las cajas negras, se escucha al comandante desactivar los instrumentos mientras el copiloto había dejado la cabina. El comandante sufría de depresión fuerte, y graves problemas económicos. 104 personas perdieron la vida.
-El 11 de octubre de 1999 un piloto de Air Botswana de baja medica roba un ATR42, y estrella el avión contra otros dos ATR42 vacíos en las pistas del aeropuerto de Gaborone Botswana.
-El peor de todo, y que causó grande controversias. 217 personas murieron a bordo del B767 de Egyptair 990 que había despegado de Nueva York el 31 de octubre de 1999. El avión entra en un rápido descenso. La NTSB concluyó que el accidente fue el resultado de una manipulación intencionada de los mandos. Oraciones escuchadas en las cajas negras, llevaron a esta conclusión.
-El más reciente hasta el momento ocurre el 29 de noviembre de 2013, cuando un Embraer de LAM en vuelo 470 comienza a descender entre Maputo y Luanda y se estrella en el suelo sin llamadas de emergencia. De nuevo el comandante estaba solo en cabina, y se escuchó la manipulación intencionada de los mandos. 33 personas perdieron la vida.