RUNNING ON WAVES: Un día de navegación.
Hoy podía escuchar las velas del Running on Waves. Un suave bamboleo, mecía a sus pasajeros que comenzaban a desperezarse. Soplaba el viento. Los primeros pasajeros en levantarse, estiraban su esterilla para recibir la primera clase de Yoga del día.
Hoy tocaba día de navegación, algo muy flexible en un navío pequeño. En todo momento, la sensación de hacerte especial está presente, en la mente de nuestros tripulantes.
8:00 Desayuno
Las comidas se toman en el único salón del barco, y todo se basa en tres principios esenciales: frescura, inmediatez y comida casera. Mi té llega impoluto y perfecto. Comienza a sonar una maquina de café vintage. huevos, bollería deliciosamente fresca, baguette crujiente, frutas recién cortadas, y una tabla de queso y embutidos perfectos. El yogur griego, embarcado en cada puerto, es maravilloso.
10:00 Momentos «de contemplación»
Pueden ser de cualquier índole. No puedo resistir la atracción de ir a la proa avanzando al ritmo de alguna canción ñoña. Podemos casi tocar el agua, escuchar el viento, las olas o acostarnos en la red de proa sobre la espuma del mar. Con un poco de suerte, podremos ver algún delfín haciendo carreras con el velero.
11:00 El mar es nuestro protagonista
Si hacemos un crucero, es porque el mar debe estar siempre presente. Simplemente zambúllete en él, sin demasiados problemas. Con la ayuda de multitud de «juguetes» marinos, podemos hacer una larga lista de atractivos acuáticos. Windsurf, ski, kayak, snorkling, baños en alta mar, o incluso usar un tobogán hinchable que proporciona emocionantes sensaciones.
13:00 Algo por aprender
Que el velero sea de pequeño porte, no significa que tengamos que aburrirnos. Clases de idioma, cocina, baile griego, y tal vez la más popular de todas: las clases de nudos marineros. Aleksay, «alias el vikingo» tiene toda la paciencia del mundo para hacernos pasar un buen rato.
14:00 Almuerzo
Podemos oler aromas mediterráneos en el comedor. Ensaladas, sopas, entrantes fríos y dos o tres platos principales. Sencillos pero inmaculadamente ejecutados. Siempre con un toque mediterráneo, o el país en cuestión en donde el barco esté. Huele a mousaka, hierbas mediterráneas, golosos postres helenos.
15:00 Visita al puente o en el jacuzzi
Por supuesto en régimen de «puerta abierta», siempre tendremos a una tripulación muy marinera lista explicarnos mil y unas historias de nuestra navegación. Son un mar de anécdotas. Otro grupo de pasajeros se deleitan en e jacuzzi, con algún cocktail. Y por supuesto, tomando el omnipresente sol del Mediterráneo.
16:00 Siempre hay una sorpresa
Nunca se sabe lo que la tripulación tiene preparado para nosotros. Tenemos toda la flexibilidad para improvisar. Nuestros tripulantes favoritos tienen las zodiacs listas. Nos acercamos a una cala recóndita, y una playa desierta. Necesitamos sentirnos VIP y especiales. Nos ofrecen llevarnos directamente a una pequeña cala, mientras el velero, echa el ancla. Esto si es exclusvidad. Como parte de la experiencia el capitán nos informa de un safari fotográfico alrededor del barco, para darnos una vistas impagables del Running on Waves.
18:00 Siéntete un pirata.
Cuando navegas de verdad, quieres involucrarte y sentirte protagonista. ¿Has soñado alguna vez ser un pirata, subir a la punta del velero, y por un momento otear el horizonte buscando algún barco, con una enseña con una calavera pirata?. Puedes hacerlo.
19:00 Cocktail
El ser un barco pequeño, no significa que tengamos que renunciar a algunos placeres. Vadim, ya tiene preparadas tinineantes copas de champagne y deliciosos cocktails.
Los compañeros de cruceros comenzamos a compartir risas, e historias. A estas horas del día, nos sentimos relajados, maravillados, y tratados de forma única. Por supuesto, suena una maravillosa música, que pone una nota perfecta a todo el ambiente.
20:00 Cena
La parte más esencial de la gastronomía del barco es la cena. Nuestro fantástico chef filipino siempre nos sorprende. El pescado de hoy es fresquísimo, las verduras crujientes, y el consomé sabe a los campos de Egeo. Algo así como comer en casa, y hacerlo especialmente bien, sin artificios. Los postres son sublimes.
22:00 La noche es joven
Nuestro capitán ruso, nos sorprende con una conferencia, y sus videos más personales, de cuando era marino de la flota del Pacífico, o vigilaba el paso de los piratas por el Canal de Suez. Luego vienen karaoke, bebidas, y horas de charlas con unos compañeros de singladura ya amigos, en el bar exterior de popa. O sea, lo más parecido a navegar en un yate privado sin tener que comprarlo.