VIDEO REPORTAJE: 6 cosas que podrás hacer en el Celestyal Crystal
Cuando embarcamos en un barco de crucero, cada persona tiene una dinámica propia a la hora de divertirse. Los seres humanos somos completamente diferentes, y cada uno de nosotros busca cosas variadas en cuanto a su ocio se refiere. Descansar, sentirse activo, perderse en alguna escala, o simplemente perder su mirada en el mar. Las Islas Griegas son los lugares más maravillosos del planeta.
No necesitarás muchas cosas más para tener un crucero inolvidable. ¿Y cómo es pasar tus horas libres en el Celestyal Crystal aparte de descansar en tu camarote, o de disfrutar de su gastronomía?.
Hay 6 cosas que me encantaban
1) Aprende a bailar Sirtaki
Vale; no es una danza muy antigua sino una creación de Giorgos Provias para Zorba el Griego, en 1964. Pero sin duda, es algo que cualquier persona en el planeta reconoce como símbolo del país. Hunde sus raices en una danza tradicional griega llamada Haspiko. Bailar sirtaki es una celebración de la vida. Es pasión, es «Grecia», y es felicidad.
2) Cocina a la griega
Y también debemos de comer como griegos. Una sinfonía de sabores muy locales. No solo degustarlas, sino aprender como se hacen algunos de los platos más locales de la gastronomía del país. Se encienden los fogones, y el arona a yogur fresco, oréganos, ajo o ouzo invade la cubierta de piscina, hasta acariciar nuestro sentidos.
3) Un spa barato y espectacular
Quizás no sea un SPA con una lujosa piscina thermal, pero si que la lista es tan amplia, que es una idea perfecta para cubrir las pocas horas libres que nos quedan. Abro el menú, y me quedo sorprendido. Pruebo un magnífico tratamiento facial. No me puedo creer, la calidad, número de opciones, y sobre todo el precio.
Ocho tipo de masajes que van desde el clásico sueco, hasta la «estrella», con toques mediterráneos por solo 55 euros. Luego terapias exclusivas de miel, piedras volcánicas, y con orientación asiáticas. Los tratamientos corporales ofrecen opciones tan atractivas, que van desde el de «oliva y sal de Creta», el de limo volcánico, o el exfoliante de miel y azúcar. La peluquería es increíblemente barata.
4) Bares con vistas
El Time Out Bar es uno de mis lugares favoritos, del Celestyal Crystal. Situado a un lado de la cubierta ocho, es quizás el lugar más tranquilo, elegante y relajante de todo el barco. Mucho más tranquilo que el Eros Bar, en donde siempre ocurre algo, y siempre es especialmente transitado, ofrece un entorno perfecto para relejarse, charlar con tus amigos, repasar las fotos de tu móvil, o simplemente contemplar el mar con una copa de champagne, o un ouzo local.
Pero sin duda, el Thalasa Bar es el punto esencial para todos los pasajeros. Situado en popa, en plena cubierta de paseo, es perfecto para contemplar las puestas de sol, sentado en sus muebles de mimbre, o metidos en el jacuzzi.
5) Que comience el espectáculo
No es un barco tranquilo, sino muy festivo. Animación cubana, sabemos que resultados trae: fiesta. Espectáculos sencillos, correctos, con fórmulas tranquilas, y sonidos muy populares hace que estemos entretenidos. Luego, música sonando en varios lugares en el barco, y unas fiestas muy animadas hasta altas horas de la madrugada. No puede faltar noches de gala tradicionales, para brindar con el capitán.
6) Vida exterior.
Una de las virtudes del barco, es su cubierta de paseo, que da una vuelta de 360 grados alrededor de la cubierta 5. Es perfecto para caminar. Tan amplia, que es un mirador perfecto del Egeo. Luego la zona de de la piscina, es un lugar en donde se celebran todas las actividades. Además de bañarse, tomar algo en el bar, comer algo en las mesas, cada día nos ofrecen algo más. Tenemos un «Tom Cruise» local, como en la película, con demostraciones de cocktails, y malabarismos con la cocktelera.
Clases, demostraciones y lugar para los buffets extraordinarios que se celebran a bordo. La cubierta diez, es el lugar perfecto para tomar el sol, en algunas de sus tumbonas.
Mucha gente valora el lujo de diversas formas. Unos interiores lujosos y opulentos, a veces llenos de ornamentos, una cocina de autor, o un ratio espacio por pasajero especial. Yo creo, que incluso en un producto sencillo como Celestyal Cruises, el lujo radica en hacerte sentir especial. Sonrisas, amabilidad, empatía, cariño, pero sobre todo detalles.
Y cuando entras en el barco, y encuentras una tripulación única, compensa cada euro gastado, porque el lujo radica en hacerte feliz. No cuesta dinero. Y he viajado en muchos barcos. Muchos de gran lujo, y en ninguno me he sentido tan mimado, cuídado, y arropado.
Mi agradecimiento especial, a toda la tripulación del Celestyal Crystal, por poner al pasajero en el centro de la «experiencia». ¡Bravo¡.