5 cosas que me encanta comprar en Portugal
Recuerdo las primeras veces que los gallegos nos aventurábamos los fines de semana a Portugal cuando había fronteras tradicionales. Cruzábamos usualmente por el río Miño y a través del largo y metálico puente de Eiffel, en Tuy sobre el Miño, tras largas colas.
Aunque mucha gente no lo recuerde había fronteras; y sentíamos una cierta fascinación hacer una especie de contrabando particular de las cosas que comprábamos. Era muy trasgresor esconder el tabaco, el café, la loza de Macao y demás artículos debajo del coche, entre mantas, en cualquier parte del coche. Aguantar la respiración, y superar los controles de la aduana española. La policía española era especialmente puñetera a la hora de fiscalizar nuestras pequeñas compras transfronterizas.
Afortunadamente para bien, las compras en Portugal sigue siendo una fuente de placer, aunque solo sea una disculpa para ir a comer bacalao, y todo es mucho más fácil. Portugal es un país además de enternecedor y amistoso, muy moderno. Comercialmente interesante y similar a España, pero aún hay objetos de toda la vida, que todavía me gusta comprar.
1.-LENCERIA
Antiguamente se compraban toallas por kilo, y era uno de los motivos esenciales para ir al país vecino. El ahorro. Cantidad, calidad, variedad. Lo de las toallas ha pasado a mejor vida, pero la industria ha mutado. Han subido los precios, y han que hay un montón de cosas que siguen resultando atractivas sobre todo en la calidad de los materiales con los que trabajan. Los paños usados Desde ropa de cama, manteles y lencería varia es increíblemente buena.
Hay quesos de todos los tipos: con pimentón, quesos de cabra, regios contundentes, y el más tradicional, aunque con cierta orientación y origen histórico en el Edan holandés; el queso del reino, que ha sabido adaptar al famoso queso de bola, ofrece más la untuosidad de crema de la leche portuguesa.
Es mucho más suave tradicional envolvente, y es perfecto para tomar por sí solo, o combinarlo con decenas de platos. Me encanta la Marca Limiano.
3.-MARMELADA E MANTEIGA
Marmelada no es el equivalente español a nuestra mermelada, sino que es simplemente membrillo. Siguiendo también la tradición española, el producto portugués es excepcionalmente intenso y muy sabroso; y con las mejores leches de las Azores, se crea una de las mantequillas más ricas de toda Europa. Especialmente deliciosa, la salada es un aperitivo perfecto, con pan recién horneado antes de comer.
4.-COSMETICA LANDER
Cierto que estos productos cosméticos de apariencia un poco basta, son universales. Procedentes de la marca americana Lander, la Cold Cream, y las lociones hidratantes, además del desodorante han sido la base esencial de los productos de tocador económicos de media Galicia, durante muchos años. Cierto que cada vez se hacen menos, pero sigue siendo una alternativa perfecta para un buen regalo y de calidad sobrada. Los jabones «Confiança» tipo «tradicional», nos recuerdan aromas perdidos en nuestra niñez.
5.-VIHNO VERDE
El vino blanco más tradicional de la enología portuguesa ha traspasado fronteras, y es perfecto como ocurre con su vecino gallego con el que comparte uva Albariña en muchos casos. Es increíblemente bueno para maridar todo tipo de platos, comenzando por el exquisito bacalao portugués, junto con el Porto nunca pueden faltar un par de botellas en nuestras compras portuguesas. Resulta perfecto.